En el centro de enseñanza de infantil y primaria Artemi Semidán, el docente José Antonio Monzón González ha diseñado y puesto en práctica una situación de aprendizaje multidisciplinar, dirigida al alumnado de 5º y 6º de primaria, utilizando los criterios: seis de Ciencias Naturales; uno, tres y cuatro de Lengua Castellana y su Literatura; y el criterio uno y siete de Matemáticas, todo ello para 5º de primaria. En el sexto curso de primaria se utilizaron los criterios homólogos a los de quinto, ya que este curso todavía se encuentra con el currículo de Ley Orgánica de Educación. Tras la experiencia se llegó a las siguientes conclusiones:
El trabajo con robots en el aula ha permitido al alumnado desarrollar capacidades y competencias básicas de una manera muy motivadora, siendo ésta un gran potenciador del aprendizaje ya que la motivación en el alumnado es intrínseca, y parte de su centro de interés.
Todo el trabajo realizado partió de una situación con dos retos. En el primero el alumnado por grupos debe crear un robot a partir de la lectura de un texto instructivo. En el segundo cada grupo diseña un circuito que el robot del equipo contrario debe superar. Para ello podían tomar las mediciones del circuito y crear un texto instructivo que después programarían en el robot. En estas situaciones se han desarrollado principalmente las competencias lingüísticas, competencia matemáticas y en ciencia y tecnología; y la competencia digital.
Otro de los puntos clave fue el dilema de trabajar “programación”, ya que esta no se encuentra de manera explícita como contenido en el currículo, pero sí de manera implícita, ya que si entendemos por programación el conjunto de órdenes dadas tras la previa organización de ideas para que un objeto se comporte de una manera determinada, tenemos varios criterios de evaluación en el currículo que nos permite programar entendiendo ésta como un producto a desarrollar. Por ejemplo el criterio cuatro de lengua castellana y su literatura que hace referencia a los textos instructivos, que son aquellos que tienen como propósito dirigir las acciones del lector; generalmente se aplican para resolver problemas de la vida cotidiana, tanto en la escuela como fuera de ella: cómo utilizar un televisor, cómo cocinar algún alimento, cómo instalar una computadora, cómo pintar un cuarto, etcétera. El uso mismo de los medios tecnológicos nos exige seguir instrucciones, y nos obliga en ciertos casos al manejo de este tipo de textos de instrucción. Los textos instructivos tiene el propósito de orientar los procedimientos en forma detallada, clara y precisa para realizar alguna actividad simple o compleja.
Pero además de desarrollar capacidades y competencias, hemos consegido que el alumnado trabaje de manera cooperativa, desarrolle rutinas de pensamiento y se familiarice con la geometría práctica.
Por otro lado al plantear un problema o reto al alumnado debe planificar un proceso de resolución de problemas: comprender el enunciado, discriminar los datos y su relación con la pregunta, realizar un esquema de la situación, elaborar un plan de resolución, ejecutar el plan siguiendo la estrategia más adecuada, comprobar los resultados, responder y generalizar.
Para ello se crearon rutinas de pensamientos o organizadores de ideas, anexados en el proyecto.
Desarrollo de estrategias y procedimientos: ensayo-error, organización de la información, simplificar, analogía y comenzar desde atrás.
En resumen para el alumnado ha sido una experiencia inolvidable, innovadora, motivadora y sobre todo se consiguió desarrollar el currículo de manera competencial y divertida.
Actividades realizadas:
1. Montaje del robot siguiendo manual de instrucciones.
2. Programación utilizando el ladrillo de lego.
3. Carreras de robots.
Etapas/Áreas/Materias: PRIMARIA, .
Curso(s): 5º Primaria, 6º Primaria.
Tipo(s) de situación de aprendizaje: [179].
Autor/a(s): José Antonio Monzón González.
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