Consejos específicos para familias con alumnado de NEAE
Esta guía ha sido diseñada y desarrollada por miembros de los Equipos de Orientación Educativa y Psicopedagógicos de Canarias, el Área de Necesidades Específicas de Apoyo Educativo (NEAE) y el Área de Tecnología Educativa (ATE) de la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias.
1. Explícale qué está pasando.
Las personas con dificultades en la comunicación y en la accesibilidad cognitiva necesitan saber lo que está ocurriendo haciendo uso de su sistema de comunicación. Procura limitar la información que les llega sobre la pandemia, resuelve sus dudas de forma sencilla y cercana, es importante que conozcan la realidad pero también que puedan sentir que todavía hay muchas cosas que van bien en el mundo para aportarles seguridad.
Recursos:
2. Sigue en contacto con el centro escolar de tu hijo o hija para que te ayuden a guiar el proceso educativo.
Recuerda que en el centro escolar cuentan con profesionales especializados con ganas de asesorarte y acompañarte. No pretendas replicar la escuela en casa porque eso es imposible, nadie lo espera y no es tu labor como familia.
Te proponemos algunos ejemplos de buenas prácticas de Centros de Educación Especial de nuestra comunidad que comparten las actividades y consejos que están realizando durante este confinamiento para apoyar en casa:
3. Establece rutinas, dan seguridad y evitan los momentos de incertidumbre.
Intenta crear ambientes estructurados, seguir una agenda visual, calendario, organizadores, hacer uso de temporizadores, alarmas… Los periodos de aburrimiento son propicios a las crisis así que cuando sientas que necesita expulsar su energía, o da señales de irritación y frustración, prueba a cambiar de actividad o de espacio en casa. Planifica de forma conjunta las actividades a realizar durante el día, teniendo en cuenta sus intereses, gustos y emociones en cada momento, para poder predecir pero también flexibilizar según la situación. Incluye espacios de diversión familiar, son momentos difíciles para todos los miembros de la familia pero la risa es curativa y sentir el apoyo tanto de quienes están en el hogar como de los seres queridos a través de los medios digitales es vital para mantener el equilibrio y energía.
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4. Dedica un tiempo a las emociones.
Es importante comprender que estamos ante una situación muy excepcional, de la cual no hay antecedentes que permitan anticipar las respuestas, conductas, etc. y muy probablemente el estado anímico de tu hijo o hija pueda verse afectado. Estas experiencias emocionales pueden generar dificultades de conducta como aumento de estereotipias y conductas repetitivas (como mecanismo de autorregulación o de autoestimulación), conductas desafiantes… Para mejorar la situación y ayudarles puedes intentar crear cajas antiestrés, cajas sensoriales, espacios de ayuda para la autorregulación en casa, rutas sensoriales en espacios diferentes del hogar, tiempo para expresarse, hablar sobre cómo se siente, etc.
En momentos de crisis o tensión, procura utilizar un lenguaje verbal positivo, un tono suave, recurrir a aspectos de su interés, como bromas o juegos que le gusten, para captar su atención. Si se molesta o bloquea, puedes distraerle con actividades placenteras y luego intentarlo de nuevo. Ahora más que nunca, la paciencia y la empatía van a ser tus mayores aliadas.
Recursos:
5. Procura, en la medida de lo posible, realizar actividades físicas.
No solo es bueno para la salud motora sino también para el bienestar emocional. Es una manera de reducir la excitación fisiológica, la ansiedad y las conductas estereotipadas. Además de las propuestas del equipo pedagógico del centro, encontrarás diversos vídeos en Internet para enseñar yoga, mindfulness u otras formas de relajación y también podrás hacer numerosas actividades físicas con el material habitual de casa y las tareas propias en el hogar. Recuerda la importancia del control postural y los cambios posturales. Bailar, hacer circuitos por casa, jugar con pelotas, globos, etc. también pueden ser una buena alternativa para disfrutar y ponerse en forma.
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6. Estimula el lenguaje en cualquier situación cotidiana.
Puedes nombrar los objetos o pasos que realizan en las tareas, cantar, leer cuentos, poesías, jugar al veo-veo, hacer rimas, trabalenguas, retahílas, discriminar sonidos, inventar una historia a partir de imágenes, palabras encadenadas, adivinanzas, dramatizaciones, realizar movimientos faciales, actividades de soplo… haciendo uso del sistema de comunicación de tu hijo o hija.
Mantén una alimentación sana y equilibrada, propiciando la masticación, ya que la musculatura que se ejercita durante la masticación y deglución favorecen la correcta articulación en el lenguaje oral.
Recuerda que tu papel no debe tener un matiz terapéutico sino lúdico. A través del juego en familia podrás favorecer el desarrollo comunicativo y, si corriges su lenguaje, siempre de forma indirecta, aportándole la respuesta adecuada para que le sirva de modelo.
Recursos:
7. Felicita sus avances, logros y valora su esfuerzo personal.
Dedica un momento del día a revisar qué han aprendido, cada pequeño paso es una victoria y estos momentos, sin el agobio del reloj a la espalda, son ideales para poder disfrutarlos en familia.
8. Desarrolla, en la medida de sus posibilidades, su autonomía en las tareas del hogar y el autocuidado.
Intercala aquellas tareas que puede hacer individualmente, con las que puede hacer con ayuda. Dale a elegir entre varias opciones para que tenga oportunidades de control sobre la actividad (comida, ropa, ocio, etc.), de forma que le hagamos sentir bien y desarrollar su autodeterminación.
Recursos:
9. Recuerda tener tiempo para ti, el cuidado de quien cuida es muy importante.
La resiliencia es la capacidad de las personas para adaptarse positivamente a las situaciones adversas y aunque de eso seguro que ya sabes mucho, en momentos como este es normal sentir angustia, frustración, miedo por lo que están viviendo, por el contexto familiar y social, y para poder seguir adelante hay que parar también a descansar de la manera que sea más adecuada para recobrar fuerzas.
Comparte con otras familias, seres queridos, asociaciones… lo que estás viviendo. Muchas otras personas están pasando por lo mismo y la unión hace la fuerza.
Recursos:
10. Usa los recursos complementarios que tienes a tu alcance.
En la Web de recursos educativos digitales de la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias encontrarás vídeos, láminas, infografías, juegos y mucho más distribuido por áreas, materias y ámbitos de todas las etapas educativas.
Beatriz Menor, logopeda y tutora de Aula Enclave, nos ofrece orientaciones y juegos para realizar durante el confinamiento con los niños y niñas con TDAH:
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