¿La culpa es nuestra o de la pedagogía que aplicamos?

Jesús Pablo Sanz Gilmartín. Maestro de apoyo a las NEAE
CEIP La Asomada-Mácher

 El malestar docente, además de por la situación económica y social, parece haberse convertido en un movimiento de rechazo a la Pedagogía. Los diferentes y reiterados comentarios en los medios de comunicación en contra de la pedagogía y de la situación de la educación, parece que han dado lugar a un movimiento en contra de la pedagogía caracterizado por:

  • Un rechazo a ciertos «principios pedagógicos» inexactos, pero que parecen haberse asumido a fuerza de repetirlos como «no se puede aprender de memoria»; «los alumnos no tienen que esforzase»; «hay que rebajar el nivel» o «igualar por abajo».
  • Rechazo a la escuela comprensiva como un sistema de garantía de fracaso.
  • Creencia en la necesidad de restaurar la autoridad en el aula.
  • Menosprecio a la formación pedagógica.

Vamos a intentar exponer las posibles razones del «fracaso» de la escuela comprensiva en España. Puesto que la escuela comprensiva hasta los 16 años en otros países, en especial en Finlandia, ha sido aplicada con excelentes resultados (Finish PISA Team, 2002), el fracaso no se debe atribuir al sistema compresivo en sí mismo, sino a otros factores entre los que se pueden incluir: factores sociopolíticos y económicos, insuficiente inversión en educación o una deficiente formación pedagógica del estamento educativo.

 

Uno de los malentendidos más importantes es la interpretación de que el alumno no debe aprender de memoria. Benavente Barreda (2001) señala que “El principio básico del cognitivismo es desterrar la memoria y fomentar el aprendizaje racional”. El cognitivismo surgió como paradigma contrario al del conductismo y se preocupa por los procesos internos del aprendizaje, es decir, por cómo el cerebro aprende. Los defensores del constructivismo, especialmente aquellos que se encargan de estudiar cómo se produce el conocimiento en el individuo (Phillips, 1995), creen que para que los aprendizajes tengan sentido y puedan recuperarse, deben estar relacionados con aprendizajes previos, además se debe de disponer de una estructura mental organizada necesaria para hacer esos aprendizajes disponibles. Para ellos el aprendizaje es un proceso de elaboración y no de acumulación de conocimiento (Proulx, 2006). Esto no significa que no se deba usar la memoria, sino que ésta no debe ser la única forma de aprender.

 

El constructivismo considera que el hecho de presentar una serie de hechos bien estructurados no va a promover necesariamente el aprendizaje. Esto no quiere decir que se deba eliminar este método didáctico, sino que se pueden usar otros.

 

Esta confusión puede estar relacionada con la falta de rigor pedagógico en los materiales destinados a la formación y apoyo de profesores. En un estudio se encontró que los materiales eran muchos y contenían ideas sobre «la enseñanza constructivista» pero que poco tienen que ver con el marco teórico (Rubie – Davis, 2006). Pero este no es el caso de nuestro país donde las propuestas metodológicas fueron escasas y muy generales y su desarrollo posterior, en materiales didácticos, páginas Web, libros etc., ha sido escaso en especial en las primeras etapas de la reforma y su difusión no generalizada. ¿Recuerdan cuando hemos podido consultar páginas Web relacionadas con temas educativos?, porque en 1991 no había internet en la mayoría de los Centros de España.

 

Otro mito que debemos destacar es “disfrutar y esforzarse son antónimos”, esto no es verdad, en el Informe Pisa 2003 hay un capítulo que se dedica a evaluar el aprendizaje de las Matemáticas en relación con las actitudes y estrategias cognitivas y metacognitivas de los alumnos. Los resultados del estudio coinciden con los de otras investigaciones: “Sugieren que los estudiantes se embarcarán (…), en un aprendizaje de alta calidad y usando estrategias variadas si están motivados, no están ansiosos en relación al aprendizaje y creen en sus propias capacidades”. Este aprendizaje de alta calidad requiere esfuerzo por parte del alumno que solo hará si se siente motivado y disfruta aprendiendo. Por lo tanto, el objetivo de disfrutar aprendiendo es conseguir que el alumno se esfuerce.

 

Cabe la posibilidad de que el “sensacionalismo mediático” esté colaborando a proporcionar una visión distorsionada de la realidad educativa y de sus actores. Porque aunque los resultados académicos de nuestros alumnos y alumnas están significativamente por debajo de la media de los países de la OCDE, están distribuidos en todos los percentiles, esto es un poco de todo (OCDE, 2004). Es probable que los resultados sean los que cabe esperar en un país que hasta hace poco tenía las tasas más altas de analfabetismo, las tasas más bajas de escolarización y que invierte menos en educación que los países de su entorno (OCDE, 2006), y con un sistema educativo con una fuerte orientación hacia la transmisión de contenidos, cuando el Informe PISA evalúa capacidades.

 

La mayor parte de los docentes piensan que el problema que existe en las aulas hoy en día, es que se ha desposeído de autoridad en el aula al profesor.

Se sabía que escolarizar alumnos con diferentes necesidades educativas iba a crear problemas dentro de la clase (desde que se implantó la LOGSE), el problema es que el Ministerio de Educación ha tardado más de 16 años en plantear una estrategia de cambio, y que permita solucionar las necesidades de la educación. La verdad es que las diferentes comunidades autónomas y sindicatos, llevan tiempo moviéndose en este aspecto, y estudiando la mejor forma de solucionarlo, así pues, la Comunidad Autónoma de Madrid quiere dotar de más autoridad al profesor en el aula, mientras que en nuestra Comunidad Autónoma, algunos sindicatos ofrecen ayuda a los docentes para intentar evitar que el abuso por parte de alumnos y padres llegue más lejos de donde debe llegar.

 

Programas como el de mejora de la convivencia, han conseguido solucionar problemas en muchos casos y es una pena, que por la problemática de la crisis, y la falta de presupuesto, estos programas se dejen de llevar a cabo, dado que ya hemos visto a alumnos por los que no dábamos nada a principio de curso, se reconducen para integrarse en el rebaño de nuevo.

 

En el contexto actual es difícil, pero es posible que algunas medidas permitieran aplicar un modelo comprensivo; entre otras: disminuir la ratio de alumnos, en especial en las clases conflictivas y con alumnos con necesidades educativas, introducir un profesor de apoyo en el aula, crear la figura de ayudantes de aula, crear aulas temáticas dotadas de materiales adecuados para la diversidad de alumnos y que permitan hacer agrupamientos flexibles o modificar horarios.

Sería conveniente realizar un análisis profundo, reflexivo y desinteresado de los problemas de la educación actual, así como, dialogar con los miembros de la comunidad educativa para acordar, evaluar e implementar soluciones. La habilidad de analizar y evaluar problemas, de pensar críticamente, de reflexionar, son algunas de las capacidades que las nuevas teorías pedagógicas pretenden estimular en el alumnado. Es probable que las intenciones no sean suficientes cuando se carece de modelos adecuados.

 

Bibliografía:

  • BENAVENTE BARREDA, J.M. (2001). Los mitos de la reforma. Revista Iberoamericana de

Educación, 27, 77-98.

  • CARBONELL, J. Y TORT, A. (2006). La educación y su representación en los medios de comunicación. Madrid: Ediciones Morata.
  • MELGAREJO DRAPER, J. (2006). La selección y formación del profesorado: clave para comprender el excelente nivel de competencia lectora de los alumnos finlandeses. Revista de Educación, Extraordinario, 237-262.
  • FEZ MARRERO, DE E. (2006).Educación:«volver al BUP y COU», la única solución. La Voz de Lanzarote, 25. De http://www.lavozdelanzarote.com/spip.php?article6537.
  • MORENO CHUMILLAS, E. (2006). La educación Zen. De     http://amesweb.tripod.com/educacionzen.htm.

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