A su protagonista, Juan, le encanta pintarse las uñas de muchos colores. Pero un día, en el cole, se ríen de él diciéndole que por pintarse las uñas es una niña. Juan se siente dolido y, cuando pasa por segunda vez, decide no ir más al cole con las uñas pintadas. El padre de Juan entonces decide ir a recogerle como siempre con la sonrisa puesta, pero también con las uñas pintadas de colores. Hasta que un día, por su cumpleaños, toda su clase le hace un regalo muy especial: pintarse todos y todas las uñas de colores.