VIOLENCIA DE GÉNERO.
La mujer siempre ha estado presente en la historia a lo largo de los siglos pero su papel ha carecido de cualquier protagonismo quedando relegado a un segundo plano en un mundo hecho por y para el hombre.
Este papel de sometimiento condicionado por una atribuida inferioridad física, intelectual y moral la excluyó de su participación activa en la sociedad reduciéndose su ámbito al puramente doméstico.
Sólo cuando ella misma comienza a reivindicar una posición en la sociedad que le permita opinar, trabajar y votar empieza, en cierto modo, a ser admitida y valorada teniendo que vencer para ello muchas barreras.
En muchos lugares del mundo sufren las más terribles pesadillas: son sexualmente utilizadas, agredidas y sometidas a castraciones genitales; su trabajo, poco reconocido y peor remunerado que el del hombre y, además, apartada de los principales centros de poder de la sociedad, lo que, consecuentemente, hace que esté aún lejos de participar en aquellas áreas de influencia en las que se toman decisiones que inciden en su propio destino
Pero es inútil establecer comparaciones entre hombres y mujeres; por el contrario, debemos desvelar las situaciones de desigualdad social que por razón de sexo se dan en nuestra sociedad y debemos lograr el objetivo de su incorporación social en plano de igualdad con los hombres para construir una sociedad justa, igualitaria, plural y respetuosa evitando diferencias por razón de sexo.
Pero los cambios no se hacen con leyes sino con la modificación de conductas. Los grandes problemas no tienen sexo. Y somos TODOS los que debemos luchar por una convivencia en paz, libertad e igualdad.
Estamos convencidos que el respeto y la solidaridad son valores que nos enriquecen como personas y sólo, de esta manera, contribuiremos a construir una sociedad tolerante y pacífica.
Que las mujeres hayamos conseguido derechos que nos igualan a los hombres, que nos hayamos incorporado al mundo del trabajo o que hayamos alcanzado grandes metas ha sido posible gracias a que, antes que nosotras, hubo otras mujeres que lucharon duramente por derribar esas barreras de desigualdad.
Ante la violencia, TOLERANCIA CERO.
Sirva este mensaje para contribuir a crear ese clima de igualdad. En nuestras manos está que se consiga este cambio social que deseamos y, a través del acto alusivo al tema que tuvo lugar el pasado 23 de noviembre, la Comisión de la Mujer constituida por profesores y alumnos/as del CEO Puerto Cabras contribuyen, con su humilde aportación, a concienciar a su Comunidad Educativa de la realidad en la que estamos inmersos para conseguir eliminar, definitivamente, los casos de violencia de género con los que nos sobrecogen los medios de comunicación cada día.
Nuestro objetivo es contribuir a que desaparezca de todos los calendarios del mundo el Día de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.
Así lo esperamos porque… LA VIOLENCIA NO TIENE GÉNERO.
AGRADECIMIENTOS A LOS SIGUIENTES PARTICIPANTES: | |
2ºB:
Javiera Figueroa González |
2ºC:
María Cabrera González |
2ºD:
Paula Acillona Peláez Gabrielly Dos Santos Rocha Adriana Fuentes Mendoza |
3ºA:
Ekaitz Casas Núñez Alejandro Hernández Gutiérrez Andrea Peña Espinel |
3ºB:
Rocío Álvarez Péndola Mariana Angarita Afonso Mercedes Fernández Torres |
3ºC:
Alba Cabrera Torres Yasmina Ibrahimo Morales Ariadna Martín Berrios |
4ºA:
Marina Bruna Bonet María Cabanas Betancor Victoria Claro Rodríguez Nadine Gómez Pröse Silvia Jorge Liberato Carlos López Morillo |
4ºB:
María Benítez Martínez María Ángeles Gallarín Marcos Juan Manuel González Martínez Eva González Santana Andrés Ravelo Caballero Alejandro Souto González |
La comisión de la mujer del CEO Puerto Cabras:
Bene, Esther, Juanjo y Pilar.