El contacto con la naturaleza es vital entre los más pequeños, ya que son muchos los beneficios que nos proporciona.Los niños que crecen en contacto con la naturaleza tienen sentimientos más positivos sobre sí mismos y los demás y, asimismo, desarrollan un fuerte sentimiento de amor y armonía con el medio natural. Permiten mejorar el desarrollo cognitivo ampliando así la capacidad de razonamiento y de observación.
El alumnado de 3 años disfruta recolectando el naranjo del huerto escolar para posteriormente y pasar a disfrutar de un rico «jugo» de naranja.

Todo el alumnado de infantil ha plantado en sus canteros adaptados unas lechugas que cuidarán día a día para llevar un poco de nuestro huerto escolar a casa. En la imagen un grupo de alumnas de 4 años riegan las lechugas.

Los alumn@s de 3 años han realizado una actividad que lleva por título: «Del Huerto a clase». Sin duda un aprendizaje vivencial donde el alumnado construye sus propios conocimientos, valores y habilidades a través de las experiencias vividas.Esta vez fuimos a los frutales del huerto, ya que el naranjo dio sus primeras naranjas.

Con la ayuda de la maestra Ángeles los alumn@s plantaron acelgas y lechugas en los canteros en altura de infantil. El viento no pudo con las ganas de regar de los niñ@s que con sus regaderos dieron notas de color a un día tan ventoso.

Comenzamos a plantar en los canteros en altura de infantil. Hoy los niñ@s de la maestra Anuska plantaron acelgas y lechugas rojas. Al finalizar disfrutaron regando cada una de ellas, esperando unos rayitos de sol para ver su crecimiento. Un día diferente entre tierra, plantones, agua y regaderas.

Los alumn@s de 3 años B disfrutan de los días soleados jugando y compartiendo con sus compañer@s. Con estas actividades disfrutamos en entornos naturales enriquecedores para la práctica educativa.