Colaboradores: ¡Chapeau!, a las cositas bien hechas…

Mi compa, Antonio, fichaje desde las tierras de Andalucía, Almería para ser más exactos y maestro inquieto, que ya estuvo por tierras del C.E.I.P. LA Lajita, donde dejó un buen sabor de boca con el primer premio al Corto: «Soy como tú»; anda, siempre o casi siempre, a la caza y captura de momentos que, si no te pones, no los encuentras, que disparan el gusto y la exigencia de tenerlas, de su lado, enlatadas detrás de un objetivo.

Sé, sabemos que anda de “profe” por tierras de Antigua, fresquito y algo de lluvia a cualquier hora del día y día del año; lo cuento porque su trabajo le ha llevado a pasar horas, ignorando las inclemencias, con su cámara captando mil y un momento, nubes, más nubes y de fondo el celeste, nubes que corren por arriba, dando luz, o no, a la tierra que cubren; juguetes al antojo del viento, que las lleva, que las trae, formando centenares de figuras, vemos formas de animales, mantos, fantasmas de aire y lo que la imaginación apetezca, que para ello están ahí, al servicio de todos los que las disfrutamos…. ¿qué contar que no aparezca?

Me cuenta que para montar la tal peli, ha utilizado fotos y fotos, hechas por la zona de Triquivijate, pago del tal municipio de Antigua, que no lo dije, pero pertenece a la isla de Fuerteventura, y que fuera, en el tiempo, capital de la isla, centro neurálgico del devenir de los majoreros, que luego cedió sus credenciales a la actual capital, si, esa que ya ustedes conocen.

Puesto el escenario, armado con el artilugio, ¡clic, aquí!, ¡clic allá! y luego de repetir el rito un rato, otro, días seguramente y echándole horas. Luego, con la paciencia de algún santejo que se preste, y el medio, software y hardware adecuados, iniciándose en la técnia del time-lapse, vino el montaje, una tras otra, así, cuenta que hasta quinientas fotos, trabajo que va cobrando, maravillas de las TIC, vida propia.

También cuenta, ¡qué calladito se lo tenía!, que a la vez, en lo que ve pasar tantas nubes, se le va, palabra a palabra, ocurriendo y montando un bello poema sobre esos mismos juguetes de viento que va viendo pasar. Pero, es mejor que lo veamos… ¡Disfrútenlo, por favor! (Haz clic en la imagen)

Según me contó, mientras disparaba sus fotos, pasaba sus fríos y montaba su vídeo, fue componiendo un poema, una llamada a esas nubes, que vienen, que van, que traen y llevan mil y una cosas… pasen, pasen y lean…

Nube

️ Al igual que las nubes,

estamos de paso en este mundo.

Nube

️ Al igual que las nubes,

somos distintos pero caminamos juntos o separados… pero caminamos.

Nube

️ Al igual que las nubes,

dejamos nuestra huella.

Nube

️ Al igual que las nubes,

acariciamos montañas, acompañamos al sol, a la luna y a las estrellas.

Nube

️ Al igual que las nubes,

soy lo que quieras que sea.

Nube

️ Al igual que las nubes,

no hay marcha atrás.

Nube

️ Al igual que la nubes..

¡Gracias, un millón de gracias! Antonio, por traernos esos pequeños trabajitos tuyos, quedamos esperando más…