La vocación política

La noticia publicada por El País sobre los diputados del PP de la Comunidad de Madrid que «se distraían» de sus obligaciones mientras se trataba un problema de gran de relevancia para la ciudadanía, nada menos que la privatización de la Sanidad y lo que supone en el desmantelamiento de un modelo de Estado llamado «del bienestar», nos traen a la mente las consideraciones platónicas sobre el estatuto de los políticos. Las exigencias de Platón a su Rey-filósofo suponían unas condiciones muy duras en la asunción de responsabilidades y la dedicación a ellas. Sin duda, esta noticia sería considerada por el filósofo griego como una confirmación de su desprecio a los procedimientos democráticos de elección de los dirigentes de una sociedad.
Hoy otros totalitarismos también coincidirían con Platón, pero ¿cuál es la alternativa? ¿cómo garantizamos el ejercicio democrático al tiempo que la responsabilidad y preparación de nuestros dirigentes? ¿qué está fallando en el sistema para que estas noticias sean cada vez más frecuentes? O tal vez, lo podemos ver de otro modo más positivo: crece la tolerancia cero ante la irresponsabilidad de los políticos que la prensa delata y la opinión pública pone en la palestra. Y por último, ¿qué hacemos con estos señores? ¿cual debe ser el costo de su actuación? ¿te conformas con sus disculpas? ¿quién tiene que pedir responsabilidades?
Para leer la noticia y ver la imagen de la falta «in fraganti» pincha aquí: Dos diputados del PP juegan al ‘Apalabrados’ en plena votación | Madrid | EL PAÍS.
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