era su gran ilusión:
poder navegar en barco,
siguiendo el rumbo del sol.
Cuando al fin llegó el día,
de todos se despidió,
cogió todas sus cosas
y al mar se aventuró.
Cuando navegando estaba,
una tormenta se desató.
Sin rumbo iba su barco,
hasta que el mar lo abatió.
Entristecida y desolada
su familia se quedó,
pensando que él viajaba
sin saber lo que ocurrió.
Ahora su alma navega
del mundo cada rincón
cumpliendo de esta manera
la que fuera su ilusión.
Romance escrito por Sara Hernández ( 1º Eso, Curso 2012-13)
que imaginacion la de los autores con esos poemas
esta muy bien me gusta 🙂 🙂 🙂
JAJAAJAJAJ ummm como sabe el niño 🙂 😉 XD
esta regular para mi gusto xd
Como sabe el niño 🙂 😉 XD