Desde el Programa Enseñas del Servicio de Innovación Educativa queremos compartir este 18 de mayo, coincidiendo con la celebración del Día Internacional de los Museos, esta entrada en nuestro blog sobre la visita que realizamos a los Museos Vivos de La Aldea, coincidiendo con las XIX Jornadas de Patrimonio y Escuela (5, 6 y 7 de mayo).

José Pedro Suárez y Ancor Suárez, miembros de la Fundación Proyecto Desarrollo Comunitario de La Aldea, nos guiaron por los distintos museos que forman parte del proyecto. Gracias a ellos, conocimos de primera mano las características, los elementos históricos y patrimoniales más destacados, algunas anécdotas, etc. Además de ellos, tuvimos la oportunidad de escuchar las explicaciones de personas de La Aldea relacionadas con cada uno de esos museos.
De esta manera, la visita comenzó en el empaquetado de tomate, donde asistimos a una recreación de todo el proceso de trabajo. Así, las personas asistentes a la visita escuchamos testimonios de las mujeres sobre sus jornadas de trabajo y cómo empezaron a trabajar siendo niñas (algunas de ellas con 8 años). Había que trabajar de sol a sol para preparar los tomates porque se iba el barco, nos recodarban. Y mientras trabajaban, algunos cantos «Anoche me dio las doce / empaquetando tomates…».

Posteriormente, visitamos otros espacios, como la barbería (mentidero, punto de encuentro…), el de la medicina rural (dedicados a los médicos Francisco León Herrera y Juan Marrero Bravo de Laguna, hablándose también sobre el papel de las parteras, la importancia de las plantas medicinales, etc.).
A continuación, pasamos a la escuelita, en la que se conservan los pupitres, libros, instrumentos de aprendizaje de la lectura y la caligrafía, etc., pero también algunos juguetes que construían los niños y niñas de La Aldea. Se hizo mención especial a la maestra Carmita Afonso.

El otro museo que se visitó fue el dedicado a la música, en el que se habló sobre las parrandas de La Aldea, los instrumentos de los Ranchos de Ánimas (con la participación de Juan José Monzón Gil, coordinador del Programa Enseñas del Servicio de Innovación Educativa). La visita continuó por el museo del Carnaval (un espacio que hemos conocido por las actividades realizadas en el marco del proyecto educativo El Ciclo del Año en Canarias). Salimos de este museo para pasar a la carpintería, donde nos esperaba Pepito para explicarnos cómo era el aprendizaje «en la época antigua de los de atrás» el aprendizaje, qué herramientas utilizaba, de dónde se obtenía la madera, etc.
La visita se cerró con tres nuevos museos. Por un lado, el dedicado a la cerámica, dedicado a Adelfina Cubas, que combinó el trabajo con los tomates con la elaboración de la loza. El trabajo de la Fundación, como ha ocurrido en otras ocasiones ha sido excepcional y determinante para conservar su testimonio y el trabajo realizado, pues se realizaron grabaciones a Adelfina en Lugarejo con la colaboración de la FEDAC, poniendo en valor su trabajo autodidacta.

Por otro lado, visitamos la carnicería de Miguelito y Nicolasito, para la que se contó con la colaboración del alumnado de la Escuela de Arte y Superior de Diseño de Gran Canaria, que creó las piezas de fibra y silicona que la decoran.

Finalmente, llegamos a la tienda de aceite y vinagre de Juan Déniz, en la que los alimentos, los calderos y las alpargatas conviven ante la mirada y las cámaras de quienes los visitamos.

De esta manera, concluyó esta magnífica visita patrimonial organizada por la Fundación Proyecto Desarrollo Comunitario de La Aldea, en la que docentes pudimos conocer de primera mano los elementos históricos y patrimoniales del municipio de La Aldea a través de sus Museos Vivos. Sirva esta entrada para conmemorar este 18 de mayo, pero también para invitarles a visitar esos espacios y conocerlos de primera mano, así como para contar con su participación en futuras ediciones de las Jornadas.



