Fue una propuesta del Ayuntamiento de Arucas: compartir una jornada con nuestros mayores en las instalaciones del colegio. Entre la variedad de actividades que nos ofertaron, el Orobal optó por “jugar con los abuelos\as”. Y no pudo ser más acertada la decisión, porque durante dos horas nuestro alumnado de 5º y 6º disfrutó jugando a cosas de antaño, como al “teje”, al pañuelito, al teléfono roto…pero también a juegos actuales y colaborativos, sin competición, como “el átomo”. Siempre se ha dicho que “uno aprende a ser hijo\a cuando se convierte en padre\madre, y aprende a ser padre\madre cuando se convierte en abuelo\a”, porque los afectos se entienden mejor cuando se ocupa el lugar del otro. Pero no siempre los abuelos\as tienen el tiempo de jugar con sus nietos. Se ocupan de muuuuuuuuuuuchas de sus necesidades, pero no siempre pueden JUGAR. Y hoy lo hemos conseguido. Miren sus caras, las de los abuelos\as: seguro que ven en ellas más ilusión y emoción que en las de sus nietos\as. Volver a la niñez por unas horas y compartirlo con las personitas que más quieren. Eso lo vivimos hoy en el Orobal y no tiene precio…
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