Querido alumnado,

El curso 2019/2020 arrancó con cambios que en ese momento les pareció muy significativos y muy difícil de cumplir: por primera vez en la historia del IES Guanarteme, el alumnado no podía salir del aula entre clase y clase. Ahí estaban ustedes desafiándonos y ahí estábamos nosotros, indicándoles que no se podía estar en los pasillos. Sabemos que les costó mucho, porque se perdían esos besos furtivos de los enamorados, esas confidencias entre amigos que sólo se pueden hacer en persona o simplemente mirarse y estallar con esas risas tan frescas y alegres que inundan nuestro centro de alegría. Realmente, ahora sentimos pesar por ese tiempo de contacto humano que les robamos.

Si tuviera que elegir una palabra que englobara el curso de segundo de bachillerato esa sería ilusión: por conseguir la nota deseada para entrar en la carrera elegida, por ir lo más guapos y guapas posible al acto de entrega de la orla, por la fiesta de la orla, por llegar a la EBAU… En todo esto se hallaban inmersos cuando de repente todo se para. Se ven atrapados en sus casas, desorientados, llenos de la incertidumbre. Si es cierto que todos estábamos atónitos: el alumnado, el profesorado, las familias, el país entero; no es menos cierto que la gran familia que forma el IES Guanarteme reaccionó con celeridad y dio lo mejor de si misma para que a ustedes no se les rompiera la ilusión.

Estas tutoras que les hablan, quieren felicitarlos a todos: al alumnado por su valentía, por haber sido capaz de emplearse a fondo y luchar en medio de esta circunstancia tan adversa, a las familias por estar pendientes y sostener el ánimo de estos adolescentes, al profesorado que se ha implicado y buscado las herramientas para que vayan muy bien preparados a la EBAU y al equipo directivo que ha trabajado sin descanso para que este engranaje tan complejo funcionara.

Quiero imaginar que los lugares como las personas guardan un corazoncillo que late oculto entre sillas y mesas. Esas aulas que dejan atrás no estarán vacías. Los sentimientos, vivencias y emociones las han ido abarrotando durante estos años. Comenzaré con las risas que brotaban de ustedes de tal manera que era imposible no contagiarse. No han fallado las lágrimas, en ocasiones por no haber alcanzado la nota esperada y en otras por motivos más graves, todas no han llegado al corazón. La valentía impregna cada centímetro de este espacio porque hay que tenerla para superarse cada día y no rendirse ante los múltiples escollos que se han interpuesto en este arduo camino. Aquí el respeto permanecerá para siempre porque la buena educación que ustedes han mostrado en todo momento es difícil de igualar. No me puedo olvidar del esfuerzo, gracias a él han llegado hasta aquí.

Aunque aparentemente se piense que la generación a la que pertenecen es la de unos chicos y chicas cómodos, que se les ha dado todo hecho, creo firmemente que son dignos de admirar. Han soportado estoicamente esta adversidad y han seguido luchando con más ahínco que nunca para lograr sus sueños. Permítanme decirles algo, sientan admiración y orgullo por ustedes, porque no hay nada tan gratificante como servir a la sociedad. El día en que se necesite un maestro para enseñar a los niños, una médica que les atienda, un abogado que les defienda, ustedes estarán ahí, demostrando que ha valido la pena.

Les deseamos que el camino que inician sea fructífero, tendrán momentos dulces pero también difíciles. En esos momentos recuerden que en el IES Guanarteme tienen sus raíces y cual árbol centenario aquí les estaremos esperando. Sean muy felices y no permitan que nadie les haga dudar de lo valiosos que son.

Las tutoras de 2º Bachillerato (Sole, Elena y Nieves)

IMÁGENES DE LA ENTREGA