Asfixia o ahogamiento por inmersión. Guía de atención a emergencias sanitarias en los centros educativos
Ahogamiento o asfixia por inmersión, se define como la situación que provoca problemas en la respiración por inmersión en un medio líquido.
El ahogamiento es la tercera causa de muerte accidental. Los grupos con mayor riesgo son los niños y niñas de menos de cuatro años, los adultos jóvenes de 15 a 25 años y los ancianos.
Deberemos tener en cuenta la posibilidad de inmersión debida a crisis epilépticas o hipoglucemias en los niños, niñas y adolescentes con antecedentes de epilepsia o diabetes; también debido a pérdidas de consciencia o por efecto del consumo de alcohol u otras drogas.
También existe el llamado síndrome de inmersión o síncope de hidrocución (“corte de digestión”): muerte súbita que se produce por inmersión en agua muy fría. El cambio brusco de la temperatura del cuerpo (tras haber estado al sol, haciendo ejercicio y lanzarse de golpe al agua fría) provoca arritmias en el corazón, bajada de la tensión arterial y falta de oxígeno en el cerebro.
Por lo general, la persona que se está ahogando no puede pedir ayuda, por lo que se debe estar alerta a los signos de un probable ahogamiento: cuerpo inmóvil, movimientos desiguales al nadar o vestimenta poco habitual para el baño.
Si necesitan ampliar esta información lo podrán hacer en la: “Guía de atención a emergencias sanitarias en los centros educativos”