Servicio Canario de la Salud

La Organización Mundial de la Salud desempeña un papel de liderazgo clave en la coordinación y promoción de la lucha mundial contra las enfermedades no transmisibles (ENT) y la consecución de la meta 3.4 de los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS). Las ENT amenazan el avance hacia el cumplimiento de La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que incluye el objetivo de reducir en un tercio la probabilidad de muerte por cualquiera de las cuatro principales ENT entre los 30 y los 70 años de edad para 2030.

Según la OMS (2022), las enfermedades no transmisibles (ENT), también conocidas como enfermedades crónicas, suelen ser de larga duración y son el resultado de una combinación de factores genéticos, fisiológicos, ambientales y de comportamiento. Los principales tipos de ENT son las enfermedades cardiovasculares (como los infartos de miocardio y los accidentes cerebrovasculares), los cánceres, las enfermedades respiratorias crónicas (como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y el asma) y la diabetes. Se cobran la vida de 41 millones de personas todos los años, lo que equivale al 74% de todas las muertes a nivel mundial.

Los comportamientos modificables, como el consumo de tabaco, la inactividad física, la dieta poco saludable y el consumo nocivo de alcohol, aumentan el riesgo de ENT. Estos 4 factores de riesgo se vinculan al estrés, porque modifica los hábitos relacionados con la salud, aumenta las conductas no saludables, tales como la de fumar, beber alcohol, o comer en exceso, y se reducen las conductas saludables, como hacer ejercicio físico, guardar una dieta, dormir suficiente, conductas preventivas de higiene, etc. La exposición a situaciones estresantes derivadas de la vida laboral y de otras exigencias que el entorno social y familiar imponen, o las desigualdades sociales, dan lugar, con frecuencia, a aumentos en el nivel de estrés de algunas personas, lo que se asocia a una mayor probabilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares y a su vez favorecen conductas adictivas o poco saludables como el tabaquismo, consumo de alcohol o sedentarismo, que constituyen factores de riesgo cardiovascular.

En 2019, la Asamblea Mundial de la Salud amplió el Plan de Acción Mundial de la OMS para la Prevención y Control de las ENT 2013-2020 hasta 2030 y pidió que se elaborara una hoja de ruta para su aplicación entre 2023 y 2030 a fin de acelerar los avances en la prevención y control de esas enfermedades. La hoja de ruta apoya las medidas para lograr un conjunto de nueve objetivos mundiales con el mayor impacto en la prevención y gestión de las ENT. “La promoción de la salud y la alfabetización en materia de salud son factores facilitadores para gestionar la prevención y el control de las ENT, disminuir la carga de esas enfermedades y garantizar la sostenibilidad de los sistemas de salud.” (OMS)

Actuar sobre los hábitos de vida de la población, se ha convertido en una de las acciones más utilizadas para la prevención de la enfermedad y la promoción de la salud, en el caso de España, básicamente utilizando como estrategia la educación sanitaria, desde los diferentes niveles asistenciales. El Ministerio de Sanidad, señala como áreas prioritarias de Intervención en materia de estilos de vida, la alimentación, la actividad física, la sexualidad, tabaco y otras adicciones y el estrés y define el enfoque desde la promoción de la salud dirigido a promover comportamientos saludables, facilitar que las opciones saludables sean las más fáciles de tomar (OMS) y desarrollar modelos socioculturales favorables.

Canarias, tiene como estrategia de promoción de hábitos saludables “Los Círculos de la VIDA SALUDABLE” (LCDVS), como referente para avanzar en la formación de la población en los factores de protección de la salud con el objetivo de que adopte como propios, con plena conciencia y compromiso, estos estilos de vida saludables. Los Círculos de la VIDA SALUDABLE se muestran como un instrumento integrador de acciones que con anterioridad se realizaban por separado y es una forma de expresar de manera didáctica las principales recomendaciones para reducir el impacto de los determinantes de las enfermedades no transmisibles, y propiciar hábitos de vida saludables. Desde esta perspectiva las diferentes recomendaciones confluyen, como si de círculos concéntricos se tratara, en un punto central que representa la VIDA SALUDABLE.

El origen de la misma fue la Reunión de Alto Nivel de Naciones Unidas del 2011, cuyo objetivo fue instar a los Gobiernos a adoptar medidas preventivas frente a las enfermedades no transmisibles o crónicas. En el año 2012 fue presentada la primera versión de LCDLVS, que originalmente se denominó Los Círculos de la Vida. Dos años más tarde, la estrategia pasa a denominarse Los Círculos de la VIDA SALUDABLE, desarrollando posteriormente sus acciones en consonancia con la Estrategia de Promoción de la Salud y Prevención en el Sistema Nacional de Salud (EPSP), y con la aplicación de ésta en nuestra Comunidad, la Estrategia Canaria Islas y Municipios Promotores de Salud (ECIMPS), que intentan integrar y coordinar los esfuerzos de promoción de la salud y prevención entre todos los niveles, sectores y actores implicados.

Promover la salud a través de intervenciones educativas en el ámbito comunitario, en las áreas de tabaco, alimentación, actividad física, alcohol y estrés contenidas en Los Círculos de la VIDA SALUDABLE:

• Sensibilizar a la población respecto al cuidado de la salud
• Informar sobre las ventajas de una vida saludable
• Conocer los factores de riesgos para la salud
• Aprender sobre los factores protectores para la salud