Con motivo de la celebración en nuestro centro del 25N, el alumnado de 2º Bachillerato ha redactado un manifiesto para su lectura en el acto llevado a cabo en este día. En ellos han volcado todo su sentir con respecto a la importancia de este día y su compromiso con la erradicación de este tipo de violencia en nuestra sociedad.
Hoy, 25 de noviembre, nos reunimos para conmemorar el Día Internacional de la
Eliminación de la Violencia contra la Mujer, un día que nos recuerda la urgencia de
poner fin a la violencia de género en todas sus formas. La violencia machista sigue
siendo una de las violaciones más graves de los derechos humanos, una violencia que
afecta a millones de mujeres alrededor del mundo, que no entiende de fronteras, ni de
clases sociales, ni de culturas; y que se presenta en el hogar, en la calle, en el trabajo,
en las instituciones, y a menudo se silencia o se justifica.
Cada día, la violencia de género arrebata vidas, destruye sueños y limita la libertad y
la dignidad de las personas afectadas. En muchos casos, esas agresiones se ocultan, se
normalizan o se invisibilizan, lo que perpetúa el ciclo de abuso y sufrimiento. A pesar
de los avances logrados gracias a la lucha feminista, la violencia de género sigue
siendo una realidad cotidiana que requiere una respuesta urgente y colectiva: a día de
hoy son ya 40 mujeres las que han muerto a lo largo del año 2024 por culpa de lo que
ahora denunciamos.
Hoy todos los integrantes del IES Villa de Firgas nos encontramos reunidos y
comprometidos con el presente y futuro de nuestra sociedad.
Sabemos que nuestro papel como jóvenes es muy relevante y decidimos actuar no
solo mediante nuestras palabras para construir un cambio, sino abogando por el
compromiso para abolir las raíces que alimentan esta violencia y construir una cultura
basada en la igualdad y el respeto mutuo a través de unos principios que guían
nuestra postura:
• La educación es la forma más poderosa para prevenir la violencia: la
importancia de enseñar respeto y empatía desde edades tempranas. La solidaridad es muy importante: debemos apoyar a quienes sufren
violencia y no ser cómplices quedándonos callados.
• La justicia debe ser eficaz y accesible para todos: ninguna persona que
agreda a otra debe quedar impune, y las víctimas deben ser escuchadas y
protegidas.
• La igualdad de género no es negociable: ninguna persona debe ser
discriminada o agredida por su género.
Así mismo, proponemos una serie de acciones que podemos llevar a cabo para
avanzar hacia un mundo libre de violencia de género:
- Educar en igualdad: implementemos una educación igualitaria y sin estereotipos,
fomentando de esta forma el respeto.
- Revisar nuestro comportamiento: es importante reflexionar sobre nuestras
actitudes y palabras para eliminar cualquier comportamiento que motive violencia.
- Apoyar a las víctimas: apoyar en la escuela y nuestro entorno general para que
nadie se sienta solo o desprotegido.
- Denunciar sin miedo: es sin duda fundamental animar a la sociedad a romper el
silencio frente a la violencia.
En definitiva, nos comprometemos a ser agentes de cambio, a seguir luchando desde
nuestra posición de estudiantes y ciudadanos, cada pequeña acción es un paso de
gigante contra esta lacra que no tiene cabida en nuestro mundo.
Hoy más que nunca alzamos la voz:
¡Por las que están, por las que no están y por las que peligran: en casa y en las
calles vivas nos queremos!