Pieza de fruta entera. Un plátano sin pelar, una manzana, pera, uvas… Alterna las que más le gusten a tu hija/o.
Bocadillo o sándwich. Opción sencilla y nutritiva. Pueden ser de jamón serrano, de queso fresco, de atún, de pavo y tomate y un largo etcétera de posibilidades. Evita los embutidos muy grasos como el salchichón o el chorizo.
Yogur con cereales. Los lácteos son también una buena opción y pueden dar mucho de sí según las combinaciones que usemos. En un recipiente hermético ponemos yogur natural y le añadimos un puñado de cereales (bajo en azúcares preferentemente).
Frutos secos. Un puñado de nueces, almendras, anacardos,… o de fruta desecada como las pasas o ciruelas pasas. ¡Aportan mucha energía!
Otras opciones:
Queso + Tomates cherry. Es una propuesta fácil de preparar y tomar.
Hummus. Se puede comprar hecho y combinar con palitos de zanahoria, picos de pan,…
Tortitas de arroz o maíz.
Leche entera. No es necesario comprar tetrabriks pequeños, se puede traer en una botella hermética reutilizable.
