Buenos días
“No me llamo Natalia.
Jamás nací.
O si nací fue muerta.
El sol extendía sus primeros rayos
por una madrugada fatídica de marzo.
Mas no era yo la que su luz bebía.
Yo no existí jamás.”
Estos son algunos de los versos de Natalia Sosa Ayala, la escritora que ha sido elegida como figura homenajeada en la edición del Día de las Letras Canarias de este año.
El Día de la Letras Canarias se conmemora el 21 de febrero. Por eso, en nuestro instituto, el IES TEROR, queremos celebrarlo. Ya empezamos el pasado viernes con la exposición de trabajos del alumnado de 1º ESO en el recreo y hoy queremos continuar con estas palabras.
La elección de esta fecha, 21 de febrero, obedece a que ese mismo día del año 1813, tuvo lugar el fallecimiento de José de Viera y Clavijo, polifacético autor canario y claro exponente de nuestra literatura.
El Gobierno de Canarias pretende reconocer con este evento la labor llevada a cabo históricamente por los autores canarios dedicados a cualquier faceta de la cultura.
Y la poeta Natalia Sosa Ayala se considera una de las principales voces literarias de la segunda mitad del siglo XX.
Nació el 27 de marzo de 1938 en Las Palmas de Gran Canaria. Se crió en un ambiente de amor a la cultura y a las letras y de compromiso social e intelectual.
No fue una mujer al uso, fue escritora y de convicción de izquierdas en la España franquista.
A pesar de aquel contexto en el que la educación de la mujer era orientada hacia la formación en las labores domésticas, Sosa Ayala logró publicar regularmente tanto en prensa escrita como en editoriales. También se sumergió de lleno dentro de la sociedad artística de la época. Durante su juventud viajó, trabajó como profesora, aprendió a hablar varias lenguas y fue autónoma económicamente. Colaboró de forma activa con la revista “Mujeres en la isla” y en secciones de opinión del periódico “La Provincia”.
En 1980 publicó su primer libro de poemas, Muchacha sin nombre; a este le siguieron otros poemarios como Autorretrato o Diciembre.
Nunca se casó, y dedicó sus 62 años de vida a la creación de una obra en la que la búsqueda de su identidad o la idea de saberse a contracorriente fueron temáticas constantes en sus escritos. Falleció en la misma ciudad que la vio nacer en el año 2000.
La obra de Sosa Ayala abrazó todos los géneros literarios…, pero quizá la poesía fue, de todos, su arte predilecto.
Por eso, finalizamos este pequeño homenaje con los versos de Natalia Sosa Ayala dedicados a la poeta terorense Pino Ojeda.
“Quiero dejar escrita
una palabra dulce, colgar de la ventana un retal blanco.
Pero alguien
me encontrará
dormida
con el nombre de Nada
al borde de mis labios…”
Buen Día de las Letras Canarias