Blanca Pérez recordó a los representantes insulares que el Gobierno de Canarias nunca se ha planteado instalar incineradoras
La viceconsejera de Medio Ambiente y Seguridad del Gobierno de Canarias, Blanca Pérez, ha presidido una mesa de trabajo con los siete cabildos insulares con el objetivo de adaptar los sistemas de gestión y tratamiento de residuos en la Comunidad Autónoma a los nuevos requerimientos de la normativa española y europea. Las conclusiones y compromisos de este encuentro se llevarán a la segunda reunión del Task Force de Residuos que tendrá lugar este miércoles, 3 de abril, con representantes del Gobierno de Canarias, el Ministerio de Transición Ecológica, la Agencia Estatal de Administración Tributaria y la Unión Europea.
Blanca Pérez abrió este encuentro preparatorio con los representantes de los cabildos insulares recordando que, en ningún momento, en los foros de debate abiertos durante el proceso de redacción del Plan Integral de Residuos de Canarias (PIRCAN) se plantearon las incineradoras como alternativa y reiteró, con rotundidad, que el Gobierno de Canarias no va a instalarlas.
El Gobierno regional, como responsable de la planificación y coordinación de las políticas de residuos, y los cabildos, con competencias en la ordenación territorial de la gestión insular de los residuos,están trabajando en una estrategia conjunta para desarrollar los objetivos del PIRCAN en consonancia con las directrices europeas.
La viceconsejera destacó que el carácter de región ultraperiférica de Canarias representa un reto para la transición hacia un modelo circular sostenible y respetuoso con el medio ambiente. “Con este equipo de trabajo queremos garantizar que la lejanía e insularidad sean compensadas a través de políticas específicas y suficientes. Sin duda, una gestión de residuos que contribuya al cumplimiento de los objetivos de la UE para fomentar la economía circular es todo un reto para pequeños territorios aislados y superpoblados como el nuestro, ya que tenemos grandes limitaciones en torno al uso de infraestructuras para el reciclaje, por lo que debemos recurrir al transporte marítimo de los residuos hacia otros destinos, con el alto coste que supone este proceso para las Islas”, señaló.
Asimismo, la viceconsejera destacó que “es necesario trabajar en la aplicación de fiscalidad positiva como fórmula para llevar a la práctica el principio de quien contamina paga, de tal manera que las personas o empresas que gestionen mejor sus residuos sean beneficiadas en los costes asociados al servicio”.
Los cabildos insulares, por su parte, han coincido en la necesidad de que los ayuntamientos canarios actualicen sus ordenanzas de residuos y en avanzar en los procesos de insularización de la gestión, especialmente en la recogida selectiva, donde las experiencias llevadas a cabo en islas como La Palma o El Hierro están demostrando su efectividad.
En la mesa de trabajo, en la que también participaron la directora general de Protección de la Naturaleza, Susa Armas, el personal técnico de su departamento y los redactores del Plan de Residuos de Canarias (PIRCAN), se debatió sobre cómo avanzar en la producción de compost a partir de la materia orgánica de los residuos, un aspecto esencial para mejorar las tasas de recogida selectiva, favorecer al sector primario con un abono de calidad producido en Canarias y, además, disminuir el envío de residuos a vertederos.
Aparejado a este asunto, los cabildos han pedido que se estudien alternativas para el transporte de residuos entre islas, bien sea para tratamiento o para tomar parte en procesos de reciclaje, ya que actualmente los costes son uno de los factores que dificultan estos procesos en Canarias y no permiten avanzar de manera más decidida hacia una economía circular.
Los cabildos han adquirido, asimismo, el compromiso de trabajar para la aprobación o adaptación de sus planes territoriales de residuos de manera coordinada para, de esta manera, llevar a cabo en cada isla la plasmación territorial del nuevo modelo de gestión que se propone en el Plan Integral de Residuos de Canarias, cuya tramitación está actualmente en su fase final.
Principales ejes del Task Force de Residuos
Este miércoles, 3 de abril, se reunirá por segunda vez el Task Force de Residuos creado con el objetivo de desarrollar un plan de acción para poner la gestión de residuos en Canarias en sintonía con las directivas comunitarias, que se reformaron el pasado verano con la aprobación de nuevos objetivos en cuanto al aumento de las cantidades de residuos que van a reciclaje y la drástica disminución del depósito en vertederos.
Los resultados que se consigan en Canarias serán extrapolables al resto de las Regiones Ultraperiféricas, que también enfrentan realidades complejas en la gestión de los residuos por el carácter alejado, fragmentado y de alta densidad que es generalizado en estas regiones.
Durante la primera reunión del grupo de trabajo sobre residuos, celebrada el pasado mes de noviembre en Gran Canaria, con la asistencia de la comisaria europea de Política Regional, Corina Cretu, se dieron a conocer los grandes asuntos sobre los que se va a centrar la estrategia del equipo técnico de este ‘Task Force’.
En primer lugar, la búsqueda de fórmulas para que Canarias pueda tratar la mayor parte de los residuos por medio de economías de escala, que en la actualidad está vinculada al alto coste de los transportes entre islas y con el continente.
Un segundo aspecto a tratar es el control aduanero en la entrada de mercancías para evitar que accedan a las Islas aquellas que no cuenten con un sistema de retirada del mercado cuando se conviertan en residuos, y también evitar la salida ilegal de residuos, que quitan posibilidades al desarrollo del sector del reciclaje.
Debido a la condición de RUP, otro de los retos del grupo de trabajo es buscar cómo adaptar la normativa europea a Canarias, modulando su aplicación para que la recogida selectiva efectivamente vaya al reciclaje y se optimice el sistema, especialmente en lo referido a la transformación de los residuos orgánicos o bio-residuos en compost.