Ante la situación de alerta mundial generada por el COVID-19, se han incrementado las llamadas telefónicas que permiten un seguimiento de la situación de salud del paciente
El Hospital Universitario de Gran Canaria Dr. Negrín, centro adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, mantiene la actividad asistencial que se realiza a través del Programa de Atención al Paciente Crónico de Alta Complejidad, dependiente del servicio de Medicina Interna del centro hospitalario, con un servicio de asistencia telefónica ante la situación de alerta mundial generada por el COVID-19.
Se trata de un grupo de población vulnerable que necesita una atención y seguimiento constante. Aunque esta nueva situación ha supuesto un cambio en la forma de trabajar establecida en el Programa de Atención al Paciente Crónico de Alta Complejidad, intensificando la atención telefónica, dicho trabajo comienza con la valoración prioritaria de las interconsultas remitidas desde los centros de salud. Si se necesita un estudio amplio de la situación del paciente, se intenta mantenerlo en el ámbito familiar siempre que esto sea posible considerando, además, los deseos y circunstancias personales. Para lograr este objetivo, se recurre al servicio de Hospitalización Domiciliaria o al área de Hospital de Día de Medicina Interna.
No obstante, tal y como destacan especialistas en Medicina Interna del Hospital Dr. Negrín, si el paciente necesita ingreso hospitalario convencional, se intenta que se realice de manera programada siempre que sea factible, adoptándose durante la hospitalización medidas especialmente encaminadas a que el paciente conserve o recupere la mayor autonomía posible y se reduzcan las eventuales complicaciones de la hospitalización convencional.
Valoraciones
El pasado año, los profesionales que forman parte de este Programa realizaron un total de 3.242 valoraciones médicas y 3.630 valoraciones dependientes del área de enfermería. Los cambios demográficos en los países desarrollados, donde se ha producido una tendencia muy marcada hacia el envejecimiento de la población, conllevan un incremento del número de personas mayores con múltiples enfermedades crónicas y fragilidad. Por este motivo, y ante la situación de alerta sanitaria mundial generada por el COVID-19, este grupo poblacional requiere una atención aún mayor, que pasa por la necesidad de optimizar la atención a este grupo poblacional. Por este motivo, se adoptan una serie de medidas como son: una actitud proactiva, anticipándose en la medida de lo posible a eventuales complicaciones, un seguimiento clínico periódico, una atención al paciente y no a la ‘enfermedad’ y una atención médica que considere sus preferencias y objetivos de salud.
Coordinación
La coordinación y comunicación constante entre el centro hospitalario y Atención Primaria es fundamental para que el Programa de Atención al Paciente Crónico de Alta Complejidad funcione de forma adecuada. Por este motivo, los equipos hospitalarios realizan visitas mensuales a los centros de Atención Primaria. Además, es especialmente importante la colaboración entre diferentes especialidades para el abordaje de distintas patologías en un único paciente.